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Aún así, incluso la tasa de expansión que hemos visto hasta ahora no será suficiente para cubrir la demanda de energía que quedará
descubierta debido a la caída en la producción de los combustibles fósiles.

Anteriormente hemos publicado ya artículos donde se describía la escasez de los combustibles fósiles. Esta alarma ya ha sido puesta de manifiesto por instituciones nada sospechosas de tener intereses en el sector renovables, tales como la Agencia Internacional de la Energía, que tradicionalmente siempre ha defendido los intereses de la industria petrolera. Por primera vez en la historia desde la industrialización, estas fuentes de energía no serán suficientes para cubrir el crecimiento económico necesario para salir de la crisis.

Simultáneamente, las energías renovables todavía se encuentran en pañales. Sólo podrán cubrir este aumento de la demanda si crecen lo suficientemente rápido. Básicamente, la expansión de las energías renovables está siguiendo la curva típica de tres fases de la introducción de cualquier nueva tecnología. Primero hay una fase inicial con un crecimiento relativamente lento, en el que se van desarrollando una serie de técnicas qeu peuda poner el invento al servicio de las masass. Luego viene una fase de crecimiento exponencial en el que se esta fabricando para las masas. En la tercera fase, se llega a una situación de saturación. Pensemos en el desarrollo de la televisión o de los teléfonos móviles. Ambos se encuentran ya en la tercera fase.

La protección del clima no será bastante

Desafortunadamente, el desarrollo de las únicas fuentes de energía sostenibles e inagotabvles fue bloqueado durante años. Ha sido sólo la concienciación sobre el cambio climático la que ha permitido la extensión de este tipo de energías y su fomento por parte de gobiernos de todo el mundo. Y es posible que una probable crisis energética mundial nos haga olvidar el aspecto medioambiental de estas fuentes energéticas. La escasez de las energías tradicionales puede crear conflictos sociales y temor generalizado en la sociedad, puediendo incluso provocar guerras -ya las ha provocado en momentos en los que no había escasez de recursos-. La Agencia Internacional de la Energía ha estado advirtiendo durante meses de una probable escasez de petróleo que podría frenar la recuperación económica a nivel mundial, y admite que hasta ahora se había subestimado la importancia de alcanzar el pico de producción del petróleo.

La industria petrolera no tiene interés en estaciones realistas de los recursos que quedan por motivos económicos. Cuando llegue el cambio, nos encontraremos con una crisis energética mundial en un punto en el que las renovables quizás no estén preparadas para tomar el relevo; aunque también es verdad que la segunda fase del desarrollo de las renovables, ése en el que se pueden aplicar a nivel masivo, llegará también más rápido cuanto más interés tengamos en que llegue, puesto que estas tecnologías serán más baratas cuando se porduzcan a nivel masivo.

La energía eólica está creciendo más rápido de lo esperado

Dos análisis del Grupo de Observación de la Energía muestra que este cambio es factible. su descubrimiento es que las renovables pueden jugar un papel mucho más importante en la producción de energía de lo que se piensa. Pero es necesario querer que esto ocurra para poder hacerlo posible. Hasta ahora, el crecimiento ya ha superado las expectativas más optimistas. Rudolf Rechsteniner, miembro de la EWG y del parlamento suizo, ha estudiado la energía eólica. En los años 80 doblar la capacidad instalada llevaba seis años. Desde 1998, la media ha sido de sólo tres años. Si proyectamos esta tasa de crecimiento y demanda de energía en el futuro, veremos qe desde 2019, más de la mitad de todas las plantas nuevas de generación de electricidad serán de energía eólica.

Si esta tasa de crecimiento continúa,las energías renovables podrían podrían incluso cubrir ellas solas la demanda de electricidad en 2037.

Incluso hoy en día, un KWh de electricidad eólica puede ser generado con entre 6 y 8 céntimos de euro en muchas regiones. En lugares mejores, sale incluso más barato. La energía eólica es así una de las mformas más baratas de producir electricidad a gran escala. Durante los últimos 25 aós, la porductividad de los molinos eólicos ha crecido en un 1.000%. Multinacionales como General Electric, Siemens o Alstom aplican esta tecnología.

Fuente: Sun & Wind Energy Magazine