Un granjero irlandés mata dos pájaros de un tiro: por un lado, hace andar a sus animales. Por otro, produce electricidad. Éste es el invento de William Taylor.
Taylor ha creado un aparato en el que la vaca tiene su comida al final de una banda deslizable, similar a las que se usan en los gimnasios para caminar. Pero a diferencia de ésta, la banda no tiene motor, por lo que el animal debe andar continuamente para conseguir su comida. La banda está conectada a un generador que produce electricidad. De esta forma, Taylor produce la suficiente electricidad como para alimentar la ordeñadora de la vaca. Según sus cálculos, si los 1.300 millones de vacas estabuladas que hay en el mundo estuviesen sobre un aparato como éste durante 8 horas al día, se podría cubrir el 6% de la demanda eléctrica mundial.
A alguien le puede parecer cruel hacer andar al animal para producir electricidad, pero lo cierto es que puede ser hasta beneficioso para él, si tenemos en cuenta que hablamos de vacas estabuladas -metidas en establos de los que no salen casi nunca y casi sin sitio para moverse- y que las vacas que andan libres por el campo también andan cuando pastan.
Fuente: Inhabitat