Los denominados fotosensibles son aquellos que presentan un cambio de contraste notado por el ojo humano; este efecto se da al incidir la luz o el calor sobre la superficie del material, esto es, responden a estímulos externos y nos proporcionan además de su sentido estético, ya que cambian de opacidad y/o color, hacia una eficiencia energética tangible, dando respuesta a los nuevos conceptos y preceptos de la arquitectura del siglo XXI. En este artículo se descubren las propiedades que caracterizan a este tipo de materiales a la a vez que abre nuevas posibilidades en el campo del diseño y de la arquitectura.
El desarrollo a pasos agigantados de los nuevos materiales nanoestructurados aplicados a la construcción nos abre la posibilidad de pensar en una arquitectura sin límites, donde la piel envolvente de las edificaciones recobra un nuevo significado, ya que gracias al desarrollo de los materiales inteligentes, es posible llevar a cabo la consolidación de la arquitectura energéticamente eficiente, permitiendo resolver las exigencias presentadas por la ganancia excesiva de calor, condiciones acústicas, de seguridad, de iluminación sin dejar de lado las condiciones mismas de cada emplazamiento.
Es para ello muy importante conocer las caracterísitcas de los nuevos materiales, especialmente los denomiandos fotosensibles que forman parte preponderante de esta nueva piel de la arquitectura del siglo XXI, así como las tecnologías que nos permitirán el mejor aprovechamiento de estos materiales en interacción con la luz, el medioambiente y las necesidades específicas de cada usuario.
En especial tomando en cuenta que la arquitectura moderna contempla una mayor conciencia del impacto ambiental que ésta tiene, sobresaliendo el diseño interactivo con el medio donde la piel ha pasado de ser una simple conjunción de intercambio interno-externo a ser un elemento medular de la nueva arquitectura biomimética, bioclimática y sustentable donde ya no puede ser entendida como un aislante, sino como un sistema activo con múltiples funcionalidades y parte esencial del control solar y el ahorro energético.
La piel fotosensible
No está claro cuál es el aporte que la arquitectura o los arquitectos pueden hacer al medio ambiente, dado que el desarrollo del oficio está directamente relacionado con factores económicos y particulares de los clientes. Tomando en cuenta que la nueva arquitectura busca lograr una mayor interacción con la naturaleza a través de la implementación de sistemas más naturales, de bajo impacto buscando una actuación donde la tecnología se adapta al medio, esto es, no se debe caer en una actitud polarizada entre lo natural y lo tecnológico, se debe aprovechar lo positivo de ambas postulaciones ya que gacias a su combinación se puede prescindir del uso de medios mecánicos que erosionan el medio ambiente favoreciendo así la eficiencia energética.
El desarrollo de la nanotecnología y sus aplicaciones en la ingenería de materiales nos da una nueva visión respecto a la arquitectura eficientemente energética, ya que los materiales y sus métodos de aplicación están cambiando la forma de construir la nueva arquitectura que busca imitar a la naturaleza mimetizándose con el medio donde se emplaza, respondiendo en tiempo real a las condiciones ambientales, logrando un mejor confort térmico-lumínico.
La generación de la piel fotosensible se raliza con materiales inteligentes y es gracias a sus propiedades nano-estructuradas que les permite producir cambios físicos y una extraordinaria capacidad de adaptarse a las condiciones de su entorno. Uno de los principales objetivos que tiene la utilización de estos materiales es el de conseguir una piel capaz de considerar las condiciones ambientales y responder a ellos adaptándose y y regulando el intercambio de calor y / o iluminación creando así un aprovechamiento total de la energíia consumida y emitida por la edificación con el medio ambiente.
Estos materiales, desde el punto de vista energético, cuentan con singulares características que combinan el aislamiento térmico y buenas condiciones de transmisión de iluminación natural, fenómeno fotosensible que permite un cambio reversible de color u opacidad, su misión principal consiste en ofrecer protección contra el calor y/o frío excesivo, contra el deslumbramiento, regulando el intercambio termolumínico, consistente en un sistema que mimetiza la habilidad de la naturaleza para adaptarse al medio utilizando para ello materiales fotosensibles tales como cerámicas que reaccionan a la temperatura, polímeros, pinturas y vidrios que cambian de acuerdo a la luz que incide sobre ellos.
Actualmente la combinacion de este tipo de materiales con diversos sistemas nos proporcionan múltiples variaciones de acuerdo a sus cualidades mecánicas y estéticas.
Conclusiones
Con el desarrollo, utilización y aplicación de estos materaiales y sus tecnologías, la piel de la arquitectura tienen un mejor funcionamiento, comparable al de los seres vivos, pues el diseño aunado a la comprensión de los materiales debe entenderse como variables integradoras entre los avances tecnológicos y conceptos ecológicos.
El uso amplio de este tipo de materiales representa uno de los caminos para lograr el confort y la eficiencia energética que con ayuda de la nanotecnología, la ingeniería de materiales, los sistemas pasivos y mixos de climatización nos llevará a lograr nuevos conceptos en la arquitectura del siglo XXI.
Fuente: Ecoconstrucción