Proporcionar electricidad a una red de sensores requiere de una infraestructura de cables o de la rutina de cambiar pilas o baterías. Por este motivo, recoger datos de lugares de acceso difícil es imposible, o incluso puede comprometer la integridad física del personal de mantenimiento. La "recolección de energía ambiental" a través de radiotecnología es una solución que permite a estos sensores operar hasta 20 años sin necesidad de recargar la batería.
Este artículo revisará lás aplicaciones prácticas de estas nuevas tecnologías y sus aplicaciones posibles.
Numerosos sectores industriales y comerciales están aplicando ya este sistema: la domótica, infraestructura de transporte y aparatos médicos.
La automatización en los edificios (domótica) es un área importante de aplicación. Sensores, termostatos y detectores de presencia pueden aprovechar la fotovoltaica o la recolección de energía mediante radiotecnología eliminando así la necesidad de instalación eléctrica. Una de las aplicaciones de estos detectores es disminuir el consumo de la iluminación y otros servicios de la casa al mínimo cuando no detecta presencia humana dentro de ella.
Otra aplicación industrial es equipar con recolectores de energía los medidores de tensión, que pueden así enviar los datos que recolectan.
En medicina, algunos de los sensores que se llevan en el cuerpo funcionan gracias al calor o al movimiento del cuerpo. Si detectan, por ejemplo, un cambio en el ritmo del corazón, enviarán un aviso al hospital.
Si realmente te decides por utilizar este tipo de generación de energía en tus instalaciones, ten en cuenta los siguientes consejos:
Fuente: Technology First Magazine