Pues sí, Ferrari ha utilizado en sus coches biocarburante de segunda generación fabricado a base de paja de trigo.
El biocombustible fue proporcionado por Shell, aunque no se trataba de combustible renovable al 100%, puesto que se trataba de una mezcla cuya proporción no ha transcendido. Era concretamente bioetanol celulósico, y Ferrari seguirá utilizándolo durante el resto de la temporada.
Según fuentes de la petrolera holandesa, las emisiones del coche de Alonso durante la carrera disminuyeron en un 90% frente a las emitidas durante una carrera con carburante convencional.
Fuente: Energias-renovables.com