18/12/2007 - 11:15h

Denuncian el recorte de ayudas forestals para el 2008

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El Consorci Forestal de Catalunya i Unió de Pagesos denuncian el incumplimiento, por parte del Departament de Medi Ambient i Habitatge (DMAH), de los compromisos económicos adquiridos en materia de medio natural y apoyo a la gestión forestal sostenible.
La propuesta de línea de ayudas del DMAH prevé un recorte del 27% respeto a la media de los últimos seis años para bosques de titularidad privada, cuando representan el 80% de los bosques de Cataluña. Las entidades piden un presupuesto coherente para el ejercicio 2008.   

La propuesta pora el año próximo destina sólo 6 millones d’euros para el capítulo de gestión de bosques de titularidad privada y agrava la situación de olvido de los bosques catalanes por parte de la Administración. Además, queda muy por debajo de los 15 millones de euros, que el sector considera una inversión mínima y que el propio Departamento recoge en el Plan General de Política Forestal. 

Este recorte resulta especialmente grave puesto que se da después de que el presupuesto previsto para el ejercicio de este año (6,56 millones de euros) sólo cubrirá una cuarta parte de la demanda por parte del sector (20 millones d’euros). Además, el Consorci Forestal de Catalunya y Unió de Pagesos consideran incoherente una propuesta de bases que recojo un gran número de líneas de trabajo y de actuaciones estratégicas para la mejora de la gestión de los bosques de Catalunya, cuando no se disponen los recursos económicos suficientes por financiarlas. 

Como recoge el manifiesto del II Congreso Forestal catalán, celebrado el último mes de septiembre en Tarragona, dos terceras partes de Catalunya son superficie forestal. El bosque es una infraestructura natural estratégica puesto que es la base para el desarrollo económico sostenible del país. El manifiesto abarca el consenso a nivel de sector productor, agentes sociales y administraciones competentes sobre la necesidad de aumentar la inversión pública dedicada al sector. 

Esta inversión ha sido históricamente deficitaria y ha dejado los bosques catalanes y las empresas del sector en manos de un mercado globalizado que ha llevado al abandono de muchas explotaciones. Esto es traduce directamente en una destrucción de puestos de trabajo, un aumento del riesgo de incendios catastróficos y una pérdida de calidad de los espacios forestales.
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