El Congreso de los Diputados aprobó ayer la reforma de la Ley del Sector de los Hidrocarburos (LSH) que establece la obligatoriedad de la presencia de los biocombustibles en el mercado. Así, concretamente, en 2008 la ley recomienda que el 1,9% del mercado deberá ser ocupado por los biocarburantes. A partir de 2009, la recomendación pasa a ser obligación y el porcentaje de presencia de los biocombustibles deberá ser del 3,4% y de 5,83% en 2010 (en cumplimiento así del objetivo marcado en el Plan de Energías Renovables).
La sanción establecida para su incumplimiento, calificado como “falta muy grave” por la LSH, puede alcanzar los 30 millones de euros.
El presidente de APPA Biocarburantes, Roderic Miralles, ha afirmado que “aunque la nueva Ley representa un paso adelante, lamentamos que el objetivo fijado para 2008 sea únicamente indicativo y, además, muy inferior a la capacidad de producción de la industria española de biocarburantes, que permitiría alcanzar un 4,25% del mercado en 2008”. “Tampoco se entiende”, añade Miralles, “que no se hayan fijado objetivos obligatorios para más allá del año 2010, cuando la Unión Europea (UE) ya ha adoptado el compromiso de cubrir obligatoriamente como mínimo un 10% del mercado de combustibles de automoción con biocarburantes en 2020”.
Consumo bajo
En 2006, el consumo de biocarburantes en España sólo representó el 0,53% del mercado nacional de gasolinas y gasóleo para el transporte.
Y es que casi la mitad del total de bioetanol y biodiésel producidos por la industria nacional se exporta a otros países, ya que en España todavía muchos operadores petrolíferos se resisten a comercializar biocarburantes, además de los impedimentos que ponen los fabricantes de vehículos para que se use este tipo de productos en los coches de reciente fabricación.
En cambio, los principales países productores y consumidores de biocarburantes –Brasil, Estados Unidos, Suecia, Alemania, Francia, Italia y Holanda– han establecido ya obligaciones específicas de consumo de bioetanol.