La geotermia se basa en el aprovechamiento de una característica del subsuelo: mantener una temperatura homogénea a lo largo de todo el año, de forma independiente a las condiciones climatológicas externas.
El subsuelo tiene una temperatura constante que ronda los 15ºC a lo largo de todo el año, llueva o nieve en el exterior, lo cual supone una ventaja aprovechable por el ser humano, ya que es muy eficiente aprovechar esa temperatura para utilizar una bomba de calor, en este caso llamada geotérmica.
Hunosa, grupo explotador de minas de carbón en Asturias, ha detecteado la potencialidad que tiene este recurso en su cuenca minera, ya que diversas minas emanan agua a más de 20º, lo cual podría aprovecharse para generar electricidad, con lo cual han iniciado investigaciones en esta dirección.