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Los biocombustibles en España

El periódico especializado en economía 'Expansión' analiza en este artículo la situación de los biocarburantes en España.

La escalada de los precios del petróleo y el Protocolo de Kioto son los principales factores que están propiciando el desarrollo y el uso de nuevas energías más respetuosas con el medio ambiente. Este panorama, unido a la crisis nuclear iraní y al empuje industrial que están experimentando países como India y China, ha motivado que las compañías se estén volcando hacia una nueva estrategia empresarial, en la que loscombustibles ecológicos son los protagonistas.

Hasta el boom del petróleo en los años 20, eran precisamente, los combustibles ecológicos os que se utilizaban para activar los motores de os coches. De hecho, durante la prmera demostración de funcionamiento de un motor diésel, en la Feria de Exhibición de París de 1898, se utilizó aceite de cacahuete como combustible. Su inventor, Rudolph Diesel, pensaba que el futuro de ese motor -en contraposición con los de vapor de la época- pasaba por la utilización de combustibles procedentes de la biomasa. Así fue, hasta que la industria petrolera los relegó a un plano muy inferior.

Hoy, la situación es justo la contraria. Como respuesta a las crsiis del petróleo de los setenta, las políticas energéticas de los años 80 favorecieronla búsqueda de alternativas a la dependencia de los combustibles fósiles, especialmente de EEUU yBrasil.

Actualmente, los altos precios que está experimentando el petróleo, la gran dependencia energética y la conciencia de que es posible reducir el impacto de las emisiones y de los combustiles sobre el medio ambiente están marcando un nuevo cambio a las empresas. Además, las prestaciones que presentan este tipo de carburantes son similares a las del gasóleo y las gasolinas tradicionales, y se pueden utilizar sustituyendo total o parcialmente a éstos.

La producción y utilización de los biocarburantes ofrece una serie de ventajas medioambientales, energéticas y socioeconómicas respecto a los combustibles de origen fósil.

Desde el punto de vista medioambiental, su utilizacióncontribuye a la reducción de emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero a la atmósfera. Concretamente, el biodiésel no emite dióxido de azufre, lo cual ayuda a prevenir la lluvia ácida, y disminuye la concentración de partículas emitidas de metales pesados. El bioetanol en comparación con la gasolina, reduce las emisiones de monoxido de carbono e hidrocarburos. Además, al ser fácilmente biodegradables, los biocarburantes no inciden negativamente en la contaminación de los suelos. Ayudan, incluso a la eliminación de residuos en los casos en los que se utilizan como materia prima en la fabricación de biocarburantes (por ejemplo, los aceites usados en la fabricación de biodiésel).

Desde el punto de vista energético, los biocarburantes constituyen una fuente energética renovable y limpia. Su utilización contribuye a reducir la dependencia energética de los combustibles fósiles y otorga unamayor seguridad en cuanto al abastecimiento energético.

Desde la perspectiva socioeconómica, los biocarburantes constituyen una alternativa para aquellas tierras agrícolas incluidas en la Política Agrículoa Común (PAC). De esta forma, se garantiza el futuro del ámbito rural, manteniendo los niveles de trabajo y renta, y fomentando la cración de diferentes industrias agrarias.

y además son rentables, al contrario de los combustibles fósiles, que soportan gravámenes de cerca del 50%, el incentivo fiscal ha disparado las expectativas de negocio en un sector hasta ahora marginal dedicado al aprovechamiento de residuos.

La percepción actual es que los biocarburantes no podrán sustituir totalmente a los combustibles fósiles, pero sí complementarlos en forma de diferentes mezclas con el fín de reducir la dependencia respecto del petróleo, a diferencia de otras alternativas que son excluyentes (por ejemplo, los gases licuados del petróleo) y necesitan cierta duplicación del sistema motor. Los biocarburantes pueden utilizar la misma red logística de distribución que los combustibles fósiles.

El precio del crudo y el nuevo marco del Plan de Energías Renovables (PER) han modificado el escenario. En 2005, el consumo de biocarburantes en España representó tan sólo el 0.44% del mercado de gasolinas y gasóleos para el transporte. Esto significa que España, según Appa, deberá multiplicar por 16 su actual cifra de consumo para lograr el objetivo de alcanzar en 2010 una cuota del 5.83% fijado en el PER.

Sin embargo, las ventas de biocarburantes en nuestro país superaron las 63.000 toneladas equivalentes de petróleo (TEP), pero más del 60% no se destinaron al mercado español, sino a la exportación.

La empresa pionera en esta carrera es Abengoa. Desde hace tiempo elabora bioetanol, un alcohol procedente del maíz, trigo, patatas y caña de azúcar. Se mezcla en distintas proporciones con la gasolina y tiene la ventaja de que reduce entre un 40% y un 80% la emisión de gases. El año pasado facturó 226.000 metros cúbicos con destino, la mayor parte, a la exportación. Es el primer productor europeo y posee cuatro plantas en Estados Unidos.

En España, el biodiésel tiene más futuro que el etanol por el mayor consumo de gasóleo. De momento, las ocho plantas existentes fabrican 166.000 toneladas para flotas y empresas municipales de transporte.

La mayor apuesta por este biocarburante procede del consorcio Acciona - Repsol, que invertirá 300 millones en el monaje de seis plantas, de las que saldrán más de un millón de toneladas al año. Sólo con esta producción se cumplirá l amitad del objetivo del PER, que es alcanzar 2.2 millones de tep para 2010.

Ebro Puleva va a construir dos plantas con 200.000 toneladas de capacidad. Por su parte, Grupo Activos y la SEPI desarrollarán otras siete.

Fuente: Expansión, 26 de mayo de 2006