Dentro de un plan de regeneración de la Albufera de Valencia proyectado por el Ministerio de Medio Ambiente, se ha planteado la creación de una central térmica alimentada mediante desperdicios de biomasa, tales como la paja del arroz cultivado en la zona, que año tras año causa diversas molestias por el volumen que adquiere: problemas respiratorios entre vecinos de diferentes barriadas de Valencia capital y de otras poblaciones, falta de visibilidad en las carreteras de la zona, emisiones descontroladas de CO2…
La electricidad generada se utilizaría para el sistema de depuración del agua de Pinedo y su distribución por el parque.
Como posibles combustibles adicionales para la central, pues se prevee que la paja del arroz no sería suficiente para todo el año, se considera usar también lodos de la depuradora o residuos verdes de la zona.
La idea, que ha sido presentada por la empresa pública Acuamed, no deja de tener sus dificultades técnicas, como puede ser el grado de humedad de la paja, y la concentración de grandes cantidades centradas en el periodo de cosecha.