El biogás procedente de basuras urbanas será el combustible que abastecerá de calor y electricidad a 2.000 viviendas que se hallan en construcción en el Puente de Vallecas.
La producción de la energía se realizará en un central subterránea que abastecerá a todo el conjunto en construcción.
El Ayuntamiento de Madrid asegura que el grado de contaminación producido mediante este sistema, será la mitad que mediante medios convencionales.