Por su parte, el ministro de Justicia de Brasil, Tarso Genro, señaló que el número de policías desplegados en el área aumentará en 25 por ciento y también se impondrán sanciones económicas a las empresas o individuos que traten de producir en terrenos deforestados.
Aumento de la deforestación
La decisión se produce un día después de que Brasil anunciara que la tasa de deforestación había aumentado rápidamente en los últimos cinco meses de 2007, cuando se perdieron al menos 3.235 kilómetros cuadrados de selva.
Este preocupante incremento fue atribuido a una mayor demanda de maíz, soya y carne vacuna. Según el corresponsal de la BBC en Brasil, Gary Duffy, durante los últimos tres años Brasil había celebrado la reducción en cerca de un 60 de la deforestación de la Amazonía, así que el aumento registrado en los últimos meses es sin lugar a dudas un revés.
La estimación inicial de deforestación se realizó gracias a un sistema que provee de imágenes de satélite, aunque se teme que la cifra final sea mayor cuando se estudien mas a fondo dichas imágenes, indicó Duffy.
La tasa mensual de deforestación pasó de 243 kilómetros cuadrados en agosto de 2007 a 948 en diciembre. El estado de Mato Grosso fue además el más afectado. Allí se registró más de la mitad del total del área deforestada, unos 1.786 kilómetros cuadrados.
Duffy agregó que mientras el presidente Lula ha elogiado en repetidas oportunidades la caída en la tasa de deforestación en la Amazonía durante los últimos tres años, grupos de defensa del medio ambiente habían advertido de que las condiciones del mercado estaban detrás de tal disminución.