Científicos italianos han rizado el rizo y han presentado el 13 de septiembre un estudio sobre la posibilidad de utilizar el CO2 como combustible.
Científicos de la Universidad de Messina han presentado a la Sociedad Química Americana el resultado de sus investigaciones -financiadas por la UE-. En este proyecto, utilizan un catalizador especial basado en nanotecnología mediante el cual el CO2 puede convertirse en unos hidrocarbonos que pueden transformarse en combustible, tras un tratamiento especial.
La energía para conseguir producir el proceso se basaría, como no puede ser de otra manera, en energías renovables, y para ello se ha pensado especialmente en la energía solar.
La productividad es aún bajísima, de un 1%, pero los técnicos seguirán investigando para mejorar la cifra y calculan que en diez años ya podrá ser lo suficientemente rentable y eficiente como para usar dispositivos de este tipo a nivel comercial.