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El ministro alemán de Medio Ambiente, Sigmar Gabriel, ha dicho hoy que el plan anunciado por el presidente de Estados Unidos, George Bush, para reducir los gases contaminantes es "del Neardenthal". Para Gabriel, el intento de Bush, más que un apoyo podría minar los esfuerzos para combatir el cambio climático. "Sin establecer límites ni objetivos de reducciones para los países industrializados, el cambio climático no se detendrá", señala Gabriel, para quien Estados Unidos y la Unión Europea deben "liderar la lucha para frenar las emisiones de gases contaminantes" y ser de ejemplo a los demás países. "Ha hecho un discurso decepcionante y no ha estado a la altura de los desafíos mundiales", ha opinado Gabriel.

 

Bush expresó ayer miércoles su intención de ponerse a la cabeza de un movimiento que reduzca el calentamiento del planeta y tildó de "fallido intento" el Protocolo de Kioto, que expira en el año 2012. Para el presidente de uno de los países más contaminantes de la Tierra, hay que fijarse como meta el año 2025. Pese a todo es un cambio, ya que durante años Bush negó que la mano del ser humano sea la responsable del calentamiento global.

El presidente de EE UU, en todo caso, no presentó ninguna propuesta y se limitó a mostrar su preocupación por que desde ahora hasta 2025 se emitan menos gases contaminantes. Por todo ello, Gabriel ha asegurado que "Bush está a la cola en este problema".