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Las empresas españolas desarrolla estrategias de abaratamiento del CO2

Las compañías españolas no están dispuestas a soportar la escalada de precios de la bolsa europea de emisiones, donde la cotización de la tonelada de dióxido de carbono (CO2) está acercándose a los máximos de julio de 2005.

Las empresas están buscando fórmulas para abaratar la adquisición de derechos de emisión. Una de ellas es el fondo español del carbono. Este instrumento de inversión, diseñado por el Gobierno español y el Banco Mundial para cumplir el Protocolo de Kioto, destinará su patrimonio a proyectos limpios en países en desarrollo que generarán créditos de CO2.

Las compañías obtendrán estos créditos, necesarios para ajustarse a los límites que el Ejecutivo les ha asignado para cumplir Kioto, a un precio hasta un 80% inferior al de la cotización del CO2 en el parqué europeo. Mientras que el instrumento del Banco Mundial generará derechos a un precio de entre 5 y 10 euros la tonelada, el derecho de CO2 cotiza a 29.50 euros. El parqué de contaminación, creado en enero del pasado año, está a punto de acercarse al nivel de 30 euros, máximo marcado en julio de 2005.

Las empresas que entraron en el fondo a finales de marzo son las eléctricas Endesa, Iberdrola, Unión Fenosa, Hidrocantábrico, y Enel Viesgo; Gas Natural; las petroleras Repsol YPF y Cepsa; la ingeniería Abengoa; la cementera Portland Valderrivas (filial de FCC) y el fabricante de azulejos Azuliber.

Además, la patronal cementera Oficemen se ha sumado al fondo. Iberdrola es la empresa que más aportará al fondo, después de asumir un compromiso de compra de 1.64 millones de toneladas de CO2, valorada en unos 8.22 millones de euros.

Las doce entidades se han comprometido a realizar una aportación que, en conjunto, suma 50 millones de euros. Éste es el tramo empresarial que el Ejecutivo ha decidido fijar para el fondo español de carbono y que equivale a menos de la mitad de la petición de las industrias, un total de 126 millones de euros.

Para las empresas, el fondo es un instrumento más interesante que la bolsa de CO2 para hacerse con derechos, al permitir obtener créditos de contaminación más baratos.

Para invertir el patrimomio del fondo, el Gobierno y el Banco Mundial ya están buscando proyectos limpios en Latinoamérica, que tendrán que ser aprobados por todos sus partícipes. Arturo Gonzalo Aizpiri, secretario general de Cambio Climático dle Ministerio de Medio Ambiente, prevé que 'en 2007, empezarán a materializarse los créditos de reducción de CO2 derivados del fondo español'.

A título particular y al margen del fondo, empresas como Endesa, Iberdrola, Unión Fenosa, Repsol YPF, Gamesa o Ence tienen proyectos de recorte de emisiones en Latinoameríca (Mecanismos de Desarrollo Limpio o MDE), que les permiten obtener derechos a entre 5 y 10 euros.

El patrimonio del fondo español se completa con una aportación de la Administración de 170 millones de euros, a través de la que el Ejecutivo confía en conseguir derechos para cumplir Kioto.

Las claves

Éstas son las reglas básicas para entender el fondo de carbono español, creado por el Gobierno y el Banco Mundial:

• El trámite previo: Los ministerios de Medio Ambiente y Economía firmaron hace un año con el Banco Mundial un acuerdo para promover el fondo de carbono. En los últimos meses, han contactado con las empresas para informarlas.
• Los próximos pasos: el Gobierno enviará un acuerdo de participación -similar a un contrato- para que las empresas lo firmen. Una vez que lo suscriban, éstas recibirán la información sobre las reglas del fondo y la cartera de proyectos, que son inversiones limpias en países en desarrollo.
• Selección de proyectos: Medio Ambiente y el BM están analizando proyectos, que después serán aprobados por el comité de participantes del fondo, integrado por representantes de las empresas y la Administración.

Fuente: Expansión, 13 de abril de 2006