Incluso en un cálculo por lo bajo y sin demasiados excesos, el consumo suele superar esa tasa recomendada de 1,40. Según datos del Ministerio de Medio Ambiente, el consumo medio de electricidad por hogar es de 363,5 kilowatios hora al mes, lo que supone una emisión de 1,4 toneladas de CO2 al año. Si a eso se añade un coche de potencia media que siempre haga trayectos cortos en zonas urbanas y no supere más de 12.000 kilómetros anuales, supone una emisión añadida de 1,9 toneladas de CO2, lo que suma un total de 3,2 toneladas. Si a la electricidad y al coche se le añade un único viaje en avión, de Madrid a Londres, ida y vuelta, hay que sumar 0,8 toneladas más de CO2. En total, unas cuatro toneladas.
Si el consumidor quisiera compensar las emisiones de su coche y del viaje en avión (unas 2,7 toneladas), podría hacerlo por unos 27,74 euros, a través de la página web
www.ceroco2.org. A cambio, el usuario recibirá un certificado numerado indicando la cantidad compensada y el proyecto al que se destina.