Los efectos del cambio climático son especialmente agudos en Perú, un país grande que dispone de recursos naturales espectaculares, que van desde selva amazónica a desierto costero, pasando por las montañas de los Andes.
El director del proyecto, Rodolfo Beltran, ha manifestado que -no ha sido fácil conseguir 40 millones de árboles, luego seleccionar las áreas donde plantarlos y, finalmente, determinar cómo se van a mantener.
Los árboles serán plantados en 18 departamentos peruanos, e incluirán eucaliptos, pinos y cipreses. Se estima que anualmente esta nueva masa forestal conseguirá captar 570.000 toneladas de CO2. Iniciativas como ésta podrían reportar incluso beneficios económicos al país, especialmente si llegan a incluirse en el comercio de emisiones o programas parecidos.
El proyecto tiene además otro tipo de beneficios para la población, y es que produce 128.000 trabajos eventuales; en un país donde casi el 40% de la población vive en la extrema pobreza, incluso un trabajo así puede ofrecer calidad de vida a una familia que vive en esas condiciones.