- Muchas de las
promesas tecnológicas irreales, realizadas en sus inicios, se revelan totalmente irracionales, o se ven desmentidas por los resultados de la investigación (un ejemplo: el reactor supergenerador francés
Superfénix [
1989-
1997]: 10.600 millones de euros de coste y 10 meses de conexión a la red eléctrica).
Estos cuatro factores hicieron, entre otros, que los grupos de presión favorables a la energía nuclear mantuvieran una actitud de prudencia y moderación durante casi 10 años (1986-1996). Pero esta actitud ha cambiado, fundamentalmente por dos motivos:
- La proximidad del final del ciclo de vida tecnológico (inicialmente previsto para 25 años) de las
centrales nucleares de segunda generación (construidas durante los años ochenta), lo que implica su cierre y su desaparición progresiva.
La tecnología nuclear se encuentra en desventaja respeto a otras más eficientes (centrales térmicas de ciclo combinado), por la maduración tecnológica de las energías renovables, y por los elevados costes de construcción. Esto ha conllevado a una reacción tipo «ahora o nunca».
Cambio de estrategia:
1. Los esfuerzos por conseguir pedidos de construcción de nuevas plantas se han dirigido fundamentalmente a los
países del tercer mundo, dónde no hay una sociedad civil y una opinión pública suficientemente informada de los peligros de la energía nuclear y es más fácil comprar voluntades políticas. Destacan los países con economías «emergentes» (China, India, etc.), muy preocupados por la crisis energética y el crecimiento del consumo. Partiendo de los pocos proyectos que se han aceptado, la propaganda se cambia después hacia los países ricos, y se intenta vender la imagen de que la energía nuclear es una opción en alza. Se trata de forzar un compromiso de los gobiernos con dudas para mantener funcionando al máximo las nucleares existentes, y conseguir garantías de
cobertura política de cualquier proyecto que se pueda presentar.
- Cambio de mensaje:
6. Se repite la mentira de que la energía nuclear es
económica. Ver el
desmentido de la mentira.
Hay más aspectos, pero estos son los más repetidos. Jugando con el miedo y la falta de información de la población respeto a la energía pretenden que su negocio se reavive o, como mínimo, que no
decaiga. Pero, como hemos dicho,
garantizando los beneficios privados con el dinero de todo el mundo.