Chávez hacía referencia a la reciente acción judicial de Exxon Mobil contra la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) que ha llevado al Reino Unido, Holanda y Estados Unidos a congelar cautelarmente fondos de PDVSA que, según el ministro de Energía venezolano, Rafael Ramírez, no afectan la operitivitat de la empresa.
«Si llegan realmente a congelar los fondos, si nos hacen daño, nosotros les haremos daño, porque no les enviaremos petróleo a EE.UU. Tomen nota, Mr. Bush, Mr. Danger», ha afirmado Chávez. Además, si esta guerra económica estalla, el presidente venezolano augura que «el precio del petróleo llegará a los 200 dólares».
Chávez, como es habitual en él, no se ha mordido la lengua y ha asegurado que Exxon Mobil es una de las empresas «punta de lanza del imperialismo» y la ha incluido en el capítulo de los «bandidos imperialistas, ladrones de cuello blanco, corruptores y derribadores de gobiernos». También ha afirmado que se trata de una de las empresas que «apoyan la invasión de Irak y siguen apoyando el genocidio» en aquel país, y forma parte de las «mafias mundiales».
En las ya habituales críticas feroces contra el presidente de los Estados Unidos, el líder de la llamada «república bolivariana» ha afirmado que George W. Bush se ha propuesto derrotarlo antes de dejar la Casa Blanca y que, a tal fin, ha ordenado que se hagan todos los esfuerzos necesarios. «Recuerden que aposté un dólar que cuando él se vaya nosotros seguiremos adelante, y él nos quiere sacar antes de retirarse», ha concluido Chávez.