Por el contrario, las exportaciones cayeron un 38,7 por ciento el año pasado y sumaron 3,89 millones de toneladas, informó la Administración General de Aduanas citada por la agencia estatal, Xinhua.
El último informe de la Agencia Internacional de la Energía destaca que el consumo chino crecerá este año un 5,4 por ciento hasta los 7,5 millones de barriles al día
El valor de las exportaciones fue de 79.770 millones de dólares (54.000 millones de euros), un 20,1 por ciento más que el año anterior y en medio de la notable subida de los precios del crudo en los mercados internacionales.
China importó además 33,8 millones de toneladas de productos derivados del petróleo el año pasado, un 7,1 por ciento menos que en 2006 y a pesar de que los grandes productores nacionales se vieron obligados a incrementar estas compras desde octubre debido a la carestía. En cuanto a las exportaciones de derivados petrolíferos, se incrementaron un 25,6 por ciento hasta las 15,51 millones de toneladas.
"China ha necesitado incrementar las importaciones de crudo año a año, debido a que el crecimiento de su producción no ha conseguido alcanzar el mismo ritmo que el del consumo", dijo Niu Li, analista del Centro de Información Estatal. En concreto, dijo, la producción ha subido a un ritmo anual del dos por ciento en los últimos años mientras que el consumo lo ha hecho al seis por ciento.
Según el último informe de la Agencia Internacional de la Energía, el consumo chino crecerá este año un 5,4 por ciento hasta los 7,5 millones de barriles al día.
China fue mayoritariamente exportadora de petróleo hasta principios de los años 90, cuando, impulsada por su crecimiento económico, se vio obligada a aumentar las importaciones a un ritmo acelerado.