"Ante esta última subida, los distribuidores queremos aclarar a la opinión pública que la cantidad íntegra de la subida, en este caso 0,65 euros de incremento por bombona, irá a parar directamente a las petroleras, sin ninguna repercusión para las empresas distribuidoras", señaló en una nota el director de la FEDGLP, Alfonso Arranz.
Arranz precisó que los distribuidores sólo se benefician de la subida del precio de venta de la bombona cuando se actualizan los costes de comercialización, "cosa que ocurre sólo una vez al año y que siempre es inferior a la subida de los costes reales de las empresas" dedicadas a esta actividad.
A este respecto, el presidente de la FEDGLP aseguró que la Federación ha pedido al Ministerio de Industria una subida de los costes de comercialización durante los últimos cuatro años para que se "solucione la grave crisis económica por la que atraviesan las empresas distribuidoras y que a corto plazo repercutirá de manera grave en el reparto".
Arranz recordó que en los últimos años han cerrado más de 60 empresas con una "pérdida importante de empleos directos e indirectos". "Los distribuidores prevén nuevos cierres en 2008 si no se adoptan medidas urgentes", recalcó el presidente de la Federación.
Ayer entró en vigor la subida del precio máximo de venta al público de la bombona de 12,5 kilogramos, que cuesta ahora 65 céntimos más, o 12,94 euros.