El regulador energético considera que la reducida capacidad de almacenamiento subterráneo es uno de los principales problemas del sistema gasista español, y advierte de la necesidad de acometer fuertes inversiones para solucionar este desarreglo.
No obstante, considera que si después de 2010 empiezan a funcionar los almacenamientos subterráneos de Yela y Castor, así como la ampliación de Gaviota, los problemas de cobertura podrían quedar paliados. La conversión de los yacimientos de Poseidón y Marismas en almacenamientos también contribuirá a aliviar el déficit previsto, indica la CNE.
El organismo entiende además que no se han cumplido algunas de sus recomendaciones a este respecto formuladas en su anterior informe marco, correspondiente a 2006. Sobre los almacenamientos subterráneos, advierte, "existe una parálisis inversora en el desarrollo de algunos de los proyectos", en contra de las sugerencias del regulador.
Para corregir el actual déficit de almacenamiento subterráneo, la CNE enumera varias infraestructuras cuyo desarrollo es "urgente", entre las que figuran los proyectos de Poseidón, Marismas, Yela, Castor y Gaviota.
Además, concede gran importancia a la construcción del gasoducto Medgaz, que transportará gas argelino a la Península, y al desarrollo de tanques de almacenamiento en plantas de regasificación.
En el informe, el organismo presidido por María Teresa Costa calcula que el incremento anual de la demanda de gas en el periodo 2007-2011 se situará en torno al 7,3%.
Demanda eléctrica
En cuanto a la previsión de demanda eléctrica, el informe prevé que durante 2008 el incremento sea del 4,1%, según el escenario central, 1,1 puntos superior al de 2009. En 2010 y 2011, la demanda aumentará a un ritmo del 3,1% anual.
Pese a la ralentización en el crecimiento del consumo, la punta de la demanda aumentará significativamente en los próximos años y pasará de los 44.700 megavatios (MW) en el ejercicio 2007-2008 a los 51.400 MW en 2011-2012.
En la situación actual, la CNE espera un aumento significativo de la energía eólica en el régimen especial y dice no observar indicios de situaciones que pudieran afectar a la cobertura de la demanda eléctrica.
En todo caso, considera "especialmente importantes" para la seguridad de suministro el desarrollo de las interconexiones eléctricas con Portugal y Francia.
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