Según Sarkozy, el IVA no debería aplicarse al nivel del precio del petróleo, que en los últimos días ha alcanzado records históricos, y aunque admitió que para tomar esa decisión a nivel europeo se necesita la unanimidad de los 27, precisó que Francia «no es el único país enfrentado al aumento del precio del petróleo».
«No es una promesa, porque Francia no decide sola, pero podría ser una respuesta a medio plazo», aseguró el presidente galo. Además, anunció la creación de un fondo para ayudar a los franceses más afectados por el aumento del precio del petróleo, que estará constituido por el excedente de los ingresos del IVA sobre los carburantes, cantidad que podría ser de entre 150 y 170 millones de euros trimestrales.
En cuanto a si el elevado precio del petróleo pesa sobre el nivel de crecimiento francés y podría influir en el diseño de los próximos presupuestos, Sarkozy reconoció que «no facilita la tarea» porque el precio del crudo se ha duplicado en un año y a ello se añadió la crisis del "subprime",la ralentización norteamericana y «un buen número de dificultades».
No obstante, Sarkozy cree que el problema económico de Francia no viene del precio del petróleo sino de «la insuficiente cantidad de trabajo y de los obstáculos que se ponen para impedir a los franceses trabajar». Pese a todas estas dificultades, sin embargo, el presidente francés descarta un plan «de rigor» no por razones ideológicas sino porque no cree en este tipo de medidas para relanzar la economía.
Además de la propuesta sobre el IVA de los productos petroleros, Sarkozy llevará también a Bruselas la propuesta de rebajar la fiscalidad de los edificios construidos con «gran calidad medioambiental» y la de los discos y los vídeos. «Si esto continúa no se venderá un disco en Francia», dijo. A su juicio, no hay ningún motivo para que el IVA de los libros, un bien cultural, sea del 5,5% y el de los discos, «un bien cultural también» sea del 19,6%.