Ya en 2001, uno de los investigadores descubrió, mientras estaba haciendo su tesis, que había un hongo que aparecía en suelos contaminados con gasolina; resultó que este hongo en cuestión puede crecer exclusivamente a partir del tolueno.
A partir de una cepa de aquel hongo se ha desarrollado la Cladophialophora inmunda Batali, Satow, Prenafeta-Boldú & de Hoog, de largo nombre como homenaje a sus creadores. Se tiene previsto utilizarla como método de descontaminación.