El ministro, que participó el miércoles en un desayuno organizado por el Club Diálogos para la Democracia y patrocinado por Repsol y PricewaterhouseCoopers, señaló que "como Gobierno, no intervenimos en las negociaciones de los accionariados de las empresas". En este asunto, Clos fue impermeable a las preguntas de la prensa sobre si el Gobierno se mantendría al margen teniendo en cuenta que una de las empresas que podría estar intentando hacerse con Iberdrola, EDF, tiene una importante participación estatal del Gobierno francés, al igual que sucediera hace todavía poco tiempo con Enel y Endesa.
Clos insistió en que el papel del Gobierno será simplemente el de garantizar que el mercado funcione de la mejor manera posible, y en ningún caso intervenir en una posible operación. El Gobierno debe llevar a cabo la "mínima intervención posible para garantizar la calidad de suministro en el país, de calidad y a buen precio", apuntó el ministro. Clos explicó que a primera hora de la mañana, ACS había desmentido estar en negociaciones con EDF para hacerse con Iberdrola y señaló que por el momento, el intento de la francesa de comprar la compañía española son "puras hipótesis", y recordó que no tiene participación en Iberdrola.