Por un lado, la organización de consumidores Facua denunció hoy que la subida promedio de la luz del 5,6% que el Ministerio de Industria aplicará a partir del 1 de julio, sumada a la del 3,3% en enero, encarecerá en lo que va de año el recibo eléctrico en un 10,9% para la mayor parte de los consumidores. Junto a esto, Facua advierte de que la menor subida será para tres grandes empresas (Arcelor, Asturiana de Zinc y Alcoa), que siguen beneficiándose de una tarifa regulada, mientras que los cerca de 4,5 millones con potencias de entre 5 y 10 kilovatios (kW) deberán hacer frente al mayor incremento. Además, lamenta que el promedio de los distintos incrementos tarifarios no esté "en absoluto en el entorno del IPC", como prometió a comienzos de junio el ministro de Industria, Miguel Sebastián, durante su comparecencia en el Congreso.
La Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu) advierte de que, a pesar de la subida anunciada del 5,6% de promedio en las tarifas eléctricas a partir del 1 de julio, el incremento "real" para 17 millones de usuarios será del 11% En un comunicado, la organización de consumidores califica de "inaceptable" que se prepare esta segunda subida en lo que va de año, que debería añadirse a la del 3,3% que se aplicó el pasado 1 de enero En concreto, Ceaccu advierte de que los 15 millones de consumidores con potencia contratada de entre 2,5 y 5 kilovatios (kW) deberán pagar un 10,6% más, mientras que los dos millones con entre 5 y 10 kW sufrirán subidas en el recibo de la luz del 11,6%. Para la organización, Industria está "jugando con la terminología e induciendo a error" al hablar de una subida promedio del 5,6%.
También se queja la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que considera que el Gobierno está incumpliendo la promesa de subir las tarifas eléctricas en línea del IPC y considera "absurda" la forma con la que se ha introducido la tarifa social. En concreto, la organización asegura que la subida promedio del 5,6% anunciada ayer será en realidad muy superior para la gran mayoría de los hogares españoles y se situará en torno al 10%. Según dice, al mantenerse invariable el coste del término de potencia --cantidad fija que se abona en todos los casos-- y al elevarse en entre el 12% y el 19% el coste del kilovatio consumido, los consumidores de tarifa 2.0.2 (domésticos de entre 2,5 kW y 5 kW de potencia) tendrán que pagar un 9,7% más.
PP, CiU, Esquerra y PNV también se pronuncian en contra
El portavoz de Economía del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Cristóbal Montoro, consideró hoy que la subida de la tarifa eléctrica propuesta por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero es "enormemente perjudicial" en un momento de ajuste como el que atraviesa la economía española. Montoro consideró que la subida de tarifas "no puede ser más inoportuna", por la "crisis que atraviesa la economía española", ya que si los ajustes que hay que hacer para afrontar un periodo de menor crecimiento se centran en el consumo final "se acaba profundizando la crisis". "Los ajustes hay que hacerlos en todo el Estado", señaló Montoro, para quien la subida de tarifas en "muy negativa". "No estamos en cualquier momento, estamos en un momento de crisis, de desaceleración de la actividad, del consumo y de perdida de poder adquisitivo, y subir las tarifas en esta situación es un dislate", agregó.
El portavoz adjunto de Convergencia y Unió (CiU) en el Congreso de los Diputados, Josep Sánchez Llibre, señaló hoy que la subida media de la tarifa eléctrica en un 5,6% es una decisión "precipitada, injusta y desproporcionada" que va a repercutir en todas las economías domésticas y en el tejido productivo "muy negativamente", y cuestionó la "transparencia" de los métodos utilizados para su cálculo. En rueda de prensa tras la Junta de Portavoces, Sánchez Llibre, pidió al ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, que tenga la "amabilidad" de comparecer en la Cámara Baja para explicar los motivos que han llevado a esta subida que se suma a la del 3,3% aprobada en enero.
Por su lado, el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en el Congreso, Joan Ridao, aseguró hoy que la subida tendrá efectos "claramente inflacionarios" y afectará "muy negativamente" a las economías domésticas ya las empresas, así como a la demanda y al consumo interno. Asimismo, expresó su interés "desde la perspectiva catalana" para saber qué medidas tomará el Gobierno para exigir a las compañías de distribución y comercialización que adecuen sus redes a las nuevas tarifas para evitar episodios de apagones como los vividos el verano pasado en Barcelona.
El portavoz económico del PNV en el Congreso, Pedro Azpiazu, calificó hoy como "una mala noticia" la subida y señaló que el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, debería haber esperado a un "mejor clima económico" para adoptar una subida "tan acusada" para el bolsillo de empresas y ciudadanos, que sumada al incremento del 3,3% de enero da como resultado un incremento acumulado del recibo de la luz del 9%, lo que supone "más que duplicar el IPC". El diputado nacionalista señaló que esta subida total tendrá un impacto "muy negativo" en los consumidores, que van a tener que hacer un "esfuerzo adicional" en sus bolsillos, y alertó de su efecto inflacionista, "nada positivo para la mala coyuntura económica" que atraviesa España.
Las eléctricas consideran la subida insuficiente
Las eléctricas valoraron el esfuerzo del Gobierno por comenzar a repercutir los costes de la electricidad en el recibo de la luz, pero consideraron "insuficiente" la subida del 5,6% de promedio propuesta por el Ministerio de Industria, informaron a Europa Press en fuentes del sector. "Es bueno que se empiece a reconocer que las tarifas eléctricas tienen que reflejar los costes, aunque la subida propuesta es claramente insuficiente, a la vista de que el precio del crudo ronda ya los 140 dólares por barril", subrayaron las mismas fuentes.
Asimismo, reconocieron el "gesto de valentía" realizado por el ministro de Industria, Miguel Sebastián, al proponer una subida de tarifas, y asumieron que en el actual contexto de desaceleración económica una subida del 20%, como la que proponían las empresas, hubiera sido considerada "inaceptable" desde el punto de vista político. "Lo importante es el cambio de dirección", subrayaron.
No obstante, expresaron su cautela en la valoración del incremento de tarifas eléctricas a partir del próximo 1 de julio a la espera de que se conozca el borrador del decreto, que despejará las "numerosas incógnitas" que persisten todavía en el sector.