13/07/2006 - 11:42h

El gigante eólico de Europa

Guadalajara acoge el mayor proyecto eólico del Viejo Continente. Dirigido por Iberdrola, frenará la emisión de 430.000 toneladas anuales de gases de efecto invernadero

Soplan buenos vientos para la energía eólica. No hay más que ver las crestas de nuestras montañas, repletas de molinos, para hacerse una idea de su importancia. Y los datos lo confirman: España es el segundo productor mundial de energía eólica -sólo por detrás de Alemania-, con 10.400 megawatios (MW) instalados.

El mejor exponente de ese liderazgo es el complejo eólico que Iberdrola inauguró el pasado 18 de mayo en Maranchón y Luzón (Guadalajara). Tienen pocas semanas de vida, pero sus instalaciones son las mayores de Europa: siete parques con 208 MW de potencia y una producción anual de medio millón de MWh, lo que equivale al consumo de 590.000 habitantes. Todo un prodigio de ingeniería al servicio de un planeta menos contaminado.

Habrá quien cuestione su eficacia, pero las cifras hablan por sí mismas; con una inversión de 188 millones de euros, la empresa ha puesto en funcionamiento Maranchón I, que cuenta con 18 MW de capacidad instalada y 9 aerogeneradores de modelo G87 de Gamesa; Maranchón IV, con 48 MW y 24 máquinas del mismo modelo, y Maranchón Sur, con 12 MW y seis aerogeneradores. En Luzón, el parque de El Cabezuelo, de 30 MW de potencia, posee 15 aerogeneradores de modelo G87 de Gamesa (2 MW de capacidad nominal), y a él se suman los parques de Clares (32 MW y 16 aerogeneradores), Escalón (30 MW y 15 aerogeneradores) y Luzón-Norte (38 MW y 19 aerogeneradores), que evacuarán la energía eléctrica generada a través de Maranchón I y Maranchón IV.

A los ecologistas les gustará saber que este proyecto evitará la emisión de 430.000 toneladas anuales de dióxido de carbono y el consumo de 100.000 toneladas de petróleo. Pero eso no es todo: su efecto depurador equivaldrá al de 30 millones de árboles, una noticia que ratifica los beneficios medioambientales de esta iniciativa.

Pero, ¿qué opinan los vecinos? El alcalde de la localidad, Joaquín de Perdro, lo tiene claro: "La mayoría se enorgullece de que el pueblo haya acogido un complejo tan útil", asegura. A esa percepción ha contribuido, sin duda, el viaje de tres días que la propia Iberdrola organizó el año pasado para que algunos habitantes conocieran las instalaciones que la compañía tiene en otros lugares de España -como Benidorm- y eliminasen cualquier prejuicio que tuvieran. "Eligieron a 50 personas y las llevaron a comprobar las bondades de estos proyectos. Fue un éxito", señala el edil.

Renovable y limpia, la energía eólica permite hacer frente al calentamiento global del planeta y favorece el desarrollo local. Prueba de ello es que, según De Pedro, "la construcción del proyecto creó 300 puestos de trabajo. Y han venido al pueblo tres familias para hacerse cargo del mantenimiento". Eso fue lo que convenció a los maranchoneros, aunque todavía hay quien critica el proyecto: dicen que el ruido de los aparatos origina contaminación acústica, que las torretas afean el paisaje, que las hélices de los molinos pueden convertirse en asesinas si coinciden con las rutas de las aves migratorias...

Iberdrola, que se ha incorporado al Consejo Global de Energía Eólica (la asociación internacional más importante del sector), extremó las precauciones durante la elaboración del proyecto, así que no habrá problemas: el nuevo complejo respetará adecuadamente su entorno.

Con esta apuesta, la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán se afianza como la primera eólica del mundo, tras alcanzar los 4.000 MW de potencia instalada en energías verdes y refuerza aún más su parque de generación renovable, que está presente en 12 comunidades españolas y en cuatro países más: Grecia, Portugal, Francia y Brasil.

Todo parece indicar que la energía eólica seguirá viento en popa. Y los responsables de Iberdlola aprovecharán la coyuntura. ¿Su próximo reto? Construir un parque en Jumilla (Murcia), para alcanzar los 6.200 MW de potencia instalada en 2008 y los 10.000 MW en 2011.

Un complejo eólico de récord



El Parque Eólico de Maranchón, situado en la provincia de Guadalajara, se ha convertido en la mayor instalaicón de aerogeneradores de la Unión Europea. Iberdrola, su promotor, es la mayor empresa eólica del mundo.

Fuente: Ainhoa Larrea, El Economista Especial, 10 de Julio de 2006

4482 lecturas |  Añadir comentario  |  Imprimir |  Enviar