Un estudio de impacto ambiental de la agencia federal responsable considera que el parque eólico no afectará negativamente a la fauna, al tráfico marítimo ni a la pesca ni al turismo.
Un 93% de los residentes encuestados en el Estado y un 78% de los habitantes del propio Cabo de Cod están de acuerdo con el proyecto, según las encuestas a la población. La administración ya ha abierto el plazo de alegaciones, que durará seis semanas.
¿El problema? En el Cabo de Cod también vive un exclusivo vecindario formado por multimillonarios que se oponen al proyecto. Curiosamente, muchos de ellos, como los Kennedy se muestran a favor de las energías renovables. Será, seguramente, lejos de sus casas.
Greenpeace también ha dicho la suya. Está recogiendo firmas a favor del que podría ser el primer parque eólico marino de los estados Unidos. Veremos quien gana.