España también tiene intención de cerrar sus centrales nucleares y el desarrollo de su potencial marítimo a través de una costa de 8.000 km les ayudará a conseguir su objetivo. Las áreas aprobadas han sido seleccionadas siguiendo criterios de velocidad del viento, topografía del lecho marino, factores ecológicos y tráfico marino.
Los molinos destinados al mar son más caros que los terrestres debido a las diferencias técnicas que implican. Ojalá el progreso de este país en el desarrollo de la offshore comience a cambiar este hecho, haciendo el equipamiento más barato para todos. Quizás de esta forma también otros países puedan introducirse en esta renovable. Francia y Grecia, que están también comenzando a implicarse con estas energías, serían posibles compradores de material eólico marino.
Para dar una idea del volumen eólico español, podemos decir que durante este año España rompió el récord mundial de generación de energía eólica al llegar al pico de 11.180 MW, que en ese momento cubrió el 40% de la demanda de electricidad del país.
Fuente: Ecoworldy