5/12/2005 - 13:42h

Los aerogeneradores eólicos son parte del futuro

Los ecologistas de asfalto ponen el grito en el cielo cuando contemplan esa sucesión de cruces clavadas en el horizonte. En los altozanos, en mitad de los riscos, sobre cerros y sierras, se levantan estáticos y severos aerogeneradores. Sin embargo, apuntan organizaciones ecologistas como Greenpeace, los molinos son una verdadera alternativa a otros sistemas de producción de energía más caros y contaminantes.

José Luis García, responsable de las campañas de Energía del colectivo verde, subraya que la energía eólica es la principal «herramienta para la reducción» de dióxido de carbono a la atmósfera. «Además, en ambientes rurales, los parques eólicos crean una nueva actividad económica que revierte en los municipios donde se instalan. Es curioso, pero esta forma de producir energía está invirtiendo la tendencia al éxodo rural que se producía en muchas provincias españolas».

El impacto visual de esta forma de energía es evidente al sistema productivo. «Ser visible es algo inherente a la producción. Pero se trata de una forma de energía infinita. Además todos sabemos de formas de energía que se ven mucho menos y, sin embargo, son muchísimo más contaminantes. Hoy, la potencia instalada es de 9.000 megavatios, un 7% de la demanda eléctrica nacional. No hay razón para temerla. Con la energía eólica ganamos todos. Aunque, hay que reconocer que no en todos los casos se han hecho las cosas bien», dice García. La evolución de los aerogeneradores ha sido tremenda, y su capacidad de producción ha crecido exponencialmente.

Un solo molino de última generación es capaz de obtener la energía que, antes, proporcionaba un centenar de aerogeneradores. «La tecnología ha avanzado muchísimo. Se han reducido costos y se ha mejorado la eficiencia. Hay equipos mayores, con mayor rendimiento y mayor producción. La energía eólica es parte de nuestro futuro». Esta evolución también ha servido, apunta García, para mitigar la mortandad entre las aves. Las palas generadoras, que ahora tienen movimientos más lentos, giran, más despacio, hacen menos ruido y dan a aves y rapaces una oportunidad de es escapar a sus largas guadañas.

Fuente: HoyDigital - Extremadura

3955 lecturas |  Ver comentarios(2)  |  Añadir comentario  |  Imprimir |  Enviar