El líder de la energía fotovoltaica en Alemania Q-Cells anunció su quiebra lunes, dejando a más de 2.000 empleados en la incertidumbre y que ilustra el colapso de toda una industria, que a pasado en pocos años del auge a la quiebra generalizada.
Q-Cells, lo explica en un comunicado "las perspectivas de vida de la empresa ya no eran suficientes garantías", de hay en declararse en bancarrota el martes en el Tribunal Administrativo de Dessau (este).
Este anuncio es el más espectacular de una serie de fracasos recientes en el campo de la energía solar en Alemania, que dejó en la cuneta empresas como Solón, Solarhybrid y Solar Millennium.
Q-Cells, había estado tratando durante semanas de aprobar un plan con sus acreedores para reprogramar y reestructurar su deuda.
Parecía haber tenido éxito, antes de que una minoría de ellos bloquearan el proceso el fin de semana pasado.
Su acción estaba en caída libre lunes, perdiendo casi un 34% a 14 centimos de euros a 13:36 GMT. A finales de 2007, mientras que Q-Cells era la cima de su éxito y era considerado un candidato para el índice bursátil alemán Dax aparecia, junto con Daimler y BMW, el coste de la accion a más de 90 euros.
Q-Cells anunció a finales de enero estar pasando una situación crítica, sus grandes pérdidas han superado al de su patrimonio. En el año 2011, ha sufrido unas pérdida de casi 850 millones de euros, con un volumen de negocio ligeramente superior a mil millones de euros.
Este colapso ilustra la derrota de la industria solar en Alemania y en Europa
Ello se explica tanto por la competencia de los fabricantes chinos baratos y por la reducción gradual de los subsidios en varios mercados clave europeos como Alemania, Italia y España.
Fundada en 1999, Q-Cells, alcanzó su punto máximo a finales de 2007 al convertirse en el primer fabricante mundial de células fotovoltaicas.