Algunos expertos indican que el futuro de las centrales de generación de electricidad puede estar en la energía solar termoeléctrica, que funciona mejor con el calor que las placas fotovoltaicas. En ese caso, países como Argelia o Arabia Saudí no lamentarán la finalización de la era del petróleo, porque poseen recursos de sobra para convertirse de nuevo en potencias energéticas basadas en las nuevas tecnologías: tienen espacio, sol y calor; las nuevas materias primas para la nueva era energética.
Tewfik Hasni, presidente de New Energy Algeria Ltd (NEAL), agencia estatal argelina para las energías renovables, ha afirmado 'es nuestra obligacióndesarrollar este potencial de energía limpia'.
NEAL, en asociación con la española Abener Energia Spa, comienza la construcción el próximo año de una planta híbrida termoeléctrica - gasística de 250 millones de euros en Hassi R'Mel, con una capacidad de 150 MW que se espera que esté en funcionamiento a finales de 2009. De estos 150 MW, 30 pertenecerán a la generación termoeléctrica de concentración.
NEAL pretende cubrir el 5% de la demanda energética de Argelia mediante centrales de este tipo 2010, y suprimir paulatinamente el uso del gas para convertirlas, a medida que la tecnología solar sea investigada y desarrollada, en únicamente solares. El próximo paso será comenzar a vender electricidad a Europa.