20/01/2009 - 18:55h

La rentabilidad de la Revolución Renovable

La rentabilidad de las energías renovablesEspaña es una potencia en energía solar y eólica alabada incluso por el mismo presidente de los EEUU, El sector renovable acoge en su seno casi mil empresas en las que trabajan 188.000 personas, entre empleos directos (89.000 trabajadores) e indirectos (99.000), según el Centro de Comisiones Obreras. El sector verde parece querer recoger el testigo de la construcción como motor económico en España.
 
Y esta posición de liderazgo mundial tiene reflejo sobre su rentabilidad: sólo la energía solar fotovoltaica moverá durante este año 470 millones de euros gracias a la venta de electricidad. Ante la crisis, los inversores se refugian en los valores seguros; pero no es sólo el oro lo que reluce... Las energías renovables, especialmente la energía solar fotovoltaica, se ha revelado en los últimos años como una inversión asegurada gracias a la retribución que pagan las compañías eléctricas, retribución que está garantizada por el Estado, y todo hay que decirlo, a la privilegiada situación geogràfica que hace de España un potencial paraíso para el aprovechamiento del astro rey.

A finales de 2006, la potencia fotovoltaica existente en España era de 141 MW; a finales de 2007, esta cifra alcanzaba los 451 MW ; hace un mes, el país rompía récords y marcaba una fecha histórica en los anales de la historia renovable al superar a la omnipresente Alemania gracias a sus 2.661 MW instalados, repartidos entre 43.600 instalaciones. Y estos datos son incompletos debido a que la Comisión Nacional de Energía aún no ha contabilizado todas las instalaciones existentes. Bien es cierto que este asombroso boom de los últimos meses se debe a la entrada en vigor de una nueva normativa que rebaja las bonificaciones de la electricidad y muchos inversores dubitativos decidieron lanzarse a la piscina antes de que fuese aprobada la nueva tarifa, pero no deja de ser un buen indicador de la salud solar en España. La nueva regulación es algo más restrictiva, para evitar la especulación de unos pocos, que ha lanzado sombras de duda sobre un sector que es el futuro -o al menos, una parte del futuro- del nuevo modelo energético que está llegando ya.  

Hasta la aprobación del RD 1578/2008, lo más frecuente era buscar terrenos rurales cercanos a una conexión de red donde descargar la electricidad, pero con el nuevo marco legal se busca fomentar las instalaciones sobre tejados de naves industriales, con lo cual los instaladores comienzan a hacer de intermediarios entre los inversores y las empresas que disponen de un tejado industrial con buena orientación para recibir la radiación solar.

La tipología de inversores es muy variado: desde grandes empresas que han realizado instalaciones de varios MW (miles de placas) a familias que viven en entorno rural y venden únicamente la electricidad producida por unas pocas placas colocadas sobre su tejado.

La energía eólica, sin embargo, está en manos de unas pocas empresas grandes: Iberdrola, Endesa, Acciona, Cesa e Hidrocantábrico. Iberdrola lidera con holgura el sector -no en vano es la primera empresa eólica mundial, seguida de cerca por Acciona. Hasta 2008, España era el segundo país en generación de energía eólica por detrás de Alemania, aunque EEUU nos arrebató la posición durante ese año.

Una más de las pruebas de la potencia española en el mercado renovable es que el laboratorio de investigación eólica más grande del mundo está situado en Navarra; es el más grande en superficie, con 30.000 m2, y también el más completo: laboratorio de ensayo de Tren de Potencia y Generador Eléctrico, laboratorio de ensayo de palas, laboratorio de materiales compuestos, túnel de viento, ensayos en campo de aerogeneradores, un Parque eólico experimental para pruebas a prototipos...

En España la aportación eólica a la cobertura de la demanda de electricidad fue de media del 11%. A nivel mundial, la energía eólica cubre el 1% de la demanda de electricidad, lo cual no está mal teniendo en cuenta que estamos hablando de tecnologías cuyo aprovechamiento aún está en pañales.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2673 lecturas |  Añadir comentario  |  Imprimir |  Enviar