Bancos, inmobiliarias, touroperadores, agricultores... Todos ellos, y más, han invertido en fotovoltaica. El cebo ha sido la garantía de una inversión asegurada, motivada por un precio de venta de la electricidad 5,75 veces el precio que el comsumidor paga por ella. En comparación, la prima que recibe una central de biomasa es únicamente de 0,4 veces. Un cebo irresistible que ha atraído a muchos capitales especulativos.
El Ministerio de Industria quiere acabar con 'el chollo' y el IDAE ha informado ya de que se hará 'un seguimento estrecho' a cada proyecto, para frenar la especulación.