Estos innovadores sistemas, que ya comercializa Renergía, son rentables actualmente para grandes espacios, como hoteles, naves industriales o complejos de oficinas, pero en los próximos años se extenderá y será también una opción muy interesante para los hogares. A ello se suma, su interés medioambiental.
David Giménez, gerente de Renergía, explica que "las máquinas de absorción se basan físicamente en la capacidad que tienen algunas sustancias, tales como el agua y algunas sales como el bromuro de litio, para absorber, en fase líquida, vapores de otras sustancias tales como el amoniaco y el agua, respectivamente. A partir de este principio es posible concebir una máquina capaz de producir frío a partir de una fuente de calor. En este punto es donde reside la principal diferencia con los ciclos de compresión de vapor convencionales, ya que estos necesitan de un compresor que consume gran cantidad de energía eléctrica para completar el ciclo termodinámico."
Fuente: Manuel Morales, La voz de Almeria economia, 29 de Julio de 2006