Los módulos no estarán integrados dentro del submarino, sino en una plataforma flotante donde se almacenará la electricidad producida por 300 m2 de módulos fotovoltaicos, que el submarino podrá repostar cuando lo necesite. La plataforma será móvil y utilizará GPS para posicionarse en los lugares previstos para la emersión del submarino.
Las empresas BLS y BKW-FMB han destinado un presupuesto de 10 millones de francos suizos para el denominado proyecto Goldfisch (literalmente, significa -pez de oro, aunque así se denomina también a los pececillos rojos que solemos tener en las pequeñas peceras domésticas).
El submarino tendrá una longitud de entre 20 y 30 metros, y capacidad para treinta pasajeros. En principio se tenía pensado utilizar el submarino sólo con fines científicos, pero algunas empresas comerciales han mostrado su interés por adquirir algunas unidades una vez esté listo y han invertido en el proyecto.