Alemania está discutiendo actualmente cómo se debe calentar en el futuro. Una parte de la solución ya está disponible: la geotermia. Para finales de la próxima década, se podría cubrir la mitad de nuestra demanda de calor con ella. A largo plazo, se podría hacer aún más.
En 2021, el gobierno federal endureció la Ley de Protección del Clima con el objetivo de que para 2045 Alemania ya no emita más gases de efecto invernadero de los que compensa en otro lugar, y después de 2050, logre emisiones negativas de gases de efecto invernadero. Para alcanzar este objetivo, es necesario cambiar la forma en que se calienta. El sector térmico representa el 56% del consumo nacional de energía, lo que nos lleva a buscar alternativas sostenibles. En su contrato de coalición, el SPD, Los Verdes y el FDP establecieron como objetivo que para 2030 la mitad de la energía para el calor municipal provenga de fuentes renovables. Hasta ahora, solo el 15% del calor es regenerativo, y la proporción ha estado estancada durante años.
Sin embargo, hay una solución sostenible y eficiente debajo de nuestros pies: la geotermia. Con cada kilómetro de profundidad hacia la tierra, la temperatura aumenta en promedio 30 grados Celsius. Este calor está a nuestra disposición de manera continua y confiable. La geotermia puede cubrir una parte considerable de la demanda local de calor en el futuro. Para lograr el objetivo del 50%, la hoja de ruta para la geotermia profunda recomienda cubrir al menos 100 teravatios hora por año (TWh / a) de geotermia profunda hidrotermal, es decir, mediante el uso de reservas de agua caliente en el subsuelo profundo, para 2030. Para 2040, se debería aspirar a un objetivo de expansión de 300 TWh / a. Eso corresponde al 25% de toda la demanda de calor alemana, no solo por parte de propietarios de viviendas y municipios, sino también por parte de empresas industriales.
Los sistemas para aplicaciones cercanas a la superficie han estado listos durante mucho tiempo para la producción en serie, especialmente para edificios individuales. Dado que la energía geotérmica generalmente ocupa poco espacio, también se puede utilizar para abastecer a las conurbaciones con alta competencia por su uso. La optimización del funcionamiento de sistemas complejos con sondas y bombas de calor terrestres es un desafío técnico mayor, pero gracias a la ayuda para la toma de decisiones EASyQuart, los planificadores pueden coordinar los componentes individuales de una solución de vecindario compleja para que funcionen de manera eficiente y sostenible.
Además, la herramienta Aquifer Thermal Energy Storage (ATES) permite almacenar el exceso de calor en el agua subterránea superficial durante los meses calurosos del verano y extraerlo en invierno para contribuir significativamente a la gestión estacional del calor en áreas urbanas. El proyecto KONATES se extenderá hasta 2025 y tiene como objetivo un prototipo que demuestre cómo se pueden lograr dos objetivos de sostenibilidad en un solo paso en ubicaciones urbanas e industriales: almacenamiento de calor y limpieza del agua subterránea.
La geotermia profunda es una solución sostenible y eficiente para suministrar áreas urbanas con un alto porcentaje de edificios existentes e instalaciones industriales. Eva Schill, jefa del Grupo Geo, destaca la importancia de aprovechar este gran potencial para lograr los objetivos de sostenibilidad en ubicaciones urbanas e industriales.
Fuente: Helmholtz