Un ingeniero de la universidad de Michigan ha desarrollado un aparato que se mueve imitando a los peces, y que transforman vibraciones del agua submarina para producir energía renovable. A esta máquina se la llama VIVACE, que se corresponde con las siglas en inglés de Vibraciones Inducidas mediante Torbellinos para Energía Limpia Acuática). Es el primer aparato que puede aprovechar la energía de la mayor parte de las corrientes submarinas que hay en el mundo, según la Universidad de Michigan. -No habrá una solución energética única, afirma el inventor de VIVACE, Michael Bernitsas, -pero si pudiésemos aprovechar tan sólo el 0,1% de la energía presente en el mar, podríamos cubrir las necesidades energéticas de 15.000 millones de personas.
VIVACE puede funcionar en corrientes de agua inferiores a dos nudos. Recordemos que la mayor parte de las corrientes submarinas de agua no superan los 3 nudos, mientras que las turbinas y los molinos de agua necesitan un mínimo de 5 nudos para su correcto funcionamiento. VIVACE no necesita olas, mareas, turbinas ni diques. -Piensa como un pez, no como un pájaro, aseguran los ingenieros de la Universidad de Michigan. Porque en el agua,la naturaleza ha inventado una estrategia diferente para los animales que viven en el medio. Si observamos el movimiento de un espermatozoide o de una ballena, observaremos que generan torbellinos que les impulsan hacia delante. Michael Bernitsas se dio centa de que esos mismos torbellinos podrían ser utilizados para generar electricidad. Él y su equipo de trabajo inventaron VIVACE, cuyos cilindros oscilan hacia arriba y hacia abajo en corrientes de agua.
Los investigadores han desarrollado un prototipo de laboratorio. Un cilindro en posición horizontal se mueve hacia arriba y hacia abajo dentro de un tanque de agua. Cuando el agua de la corriente golpea el cilindro, se crea una turbulencia que se convierte en un torbellino. El torbellino le da un pequeño impulso al cilindro. El siguiente torbellino que se forma le empuja en la dirección contraria. Estas fuerzas contrarias hacen que el cilindro vibre hacia arriba y hcia abajo. La alta densidad del agua convierte a las vibraciones en 800 veces más energéticas de lo que serían en el aire a esa velocidad. Debido a esto, el VIVACE puede producir de tres a 10 veces más energía que las turbinas mareomotrices.
Bernitsas y su equipo han tratado de imitar la piel de los peces, pues esto puede aumentar la producción de electricidad en un 40 a 70%.
El VIVACE se instalará por primera vez en aguas libres el año que viene; uno en el río Detroit y otro en mar abierto, en un lugar aún por determinar.