El acto fue más multitudinario que el del 28 de octubre del 2000, en que se reunieron 18.000 manifestantes que clamaban contra el
Plan Hidrológico del PP. Esta vez los manifestantes ocupaban más espacio en las calles de Amposta que en aquella ocasión. Muchos de los manifestantes habían venido del País Valencià y de Barcelona, y también del Aragón.
Acabada la manifestación, el portavoz de la Plataforma, Manolo Tomás, dijo en Vilaweb que el gobierno no podía desoír 'la voz de la gente', y que a partir de ahora cambiarían muchas cosas. Tomás también pidió la solidaridad de la gente del resto del territorio, y dijo que llevarían la lucha a las comarcas del territorio. 'Volveremos a tener toda la sociedad civil catalana con nosotros', aseguró Tomás.
Entre los participantes había representantes de un centenar y medio de entidades adheridas, entre las cuales
Federación de Vecinos de Barcelona, y bastantes políticos, como los regidores del PSC de Amposta que expresaron duras críticas contra su partido, representantes también de ICV, encabezados por Jaume Forcadell, y representantes de ERC, como Marta Cid, Uriel Bertran y Jaume Renyer. Entre los manifestantes también había militantes conocidos de CiU. Entre los llegados de otros lugares destacaba la Plataforma Metropolitana Contra los Trasvases (PMCT), Júcar Vivo y Unió de Pagesos.
Reacciones políticas El jefe de la oposición y presidente de CiU, Artur Mas, se solidarizó con los manifestantes, contra 'el engaño' del tripartito. 'Entiendo la reacción, porque la gente del Ebro se ha sentido traicionada y engañada', dijo Mas, aunque su formación apoya al trasvase.
El gobierno no desiste de hacer el trasvase Pese a las lluvias, el gobierno mantiene en el sistema Ter-Llobregat el nivel de excepcionalidad 2 por sequía. La subida de agua de los pantanos hacía salir automáticamente de este nivel de excepcionalidad, pero el ejecutivo se reunió de urgencia el jueves por la tarde para
modificar (pdf) el
decreto (pdf) y mantener las restricciones.
Para la PDE el objetivo del gobierno no es acabar con la sequía, sino hacer las obras del trasvase del Ebro. El portavoz de Júcar Vivo, Paco Sanz, también comentó: 'El trasvase no ha servido sino para dar alas a los que también defienden el trasvase del Ebro en Valencia y en Murcia, y el del Júcar en la Vega Baja. La posición del PP, que estaba muerta, ahora se ha reavivado. Cuestan de entender, las razones del gobierno catalán.'