Una de las limitaciones que tiene el vehículo eléctrico es lo limitado de la duración de las baterías, así como su peso y el volumen que ocupan.
Existen diferentes líneas de investigación sobre el tema. Veamos cuáles son las posibilidades de uso de estas baterías.
Iones de Litio
La batería de iones de litio utiliza sal de litio como electrolito. Actualmente son las más de mayor calidad en el mercado pero también las más caras. Son más ligeras, potentes, y se pueden recargar un número elevado de veces. Se utilizan en móviles, MP3 y otros pequeños aparatos electrónicos. Es probable que se apliquen en la próxima generación de coches híbridos.
Sony ha desarrollado una tecnología para este tipo de baterías que las hacen durar más. Utilizan Olivino en su composición.
La universidad de Waterloo está investigando en la aplicación de azufre y de la nanotecnología, que aumenta la capacidad de acumulación de la batería. También serían más ligeras y más baratas de fabricar.
Plomo ácido
Son las más antiguas y pesan mucho en relación con su producción de electricidad, pero son duraderas y baratas. Un automóvil urbano normal necesita media tonelada de este tipo de baterías para funcionar.
Baterías Zebra
Utiliza NaNiCl y se fabrican a partir de sal común, cerámica y níquel. El inconveniente es que necesitan un rango concreto de temperatura para trabajar, por lo que es necesario aislarlas. En Suiza van a construir una fábrica para estas baterías, que tienen aplicación en camiones eléctricos. Se puede cargar al 50% en 30 minutos, aunque para una carga completa necesita unas ocho horas. Es 100% reciclable. Los autobuses eléctricos de Madrid y el Renault Twingo Quick Shift Electric utilizan este tipo de baterías.
Sodio azufre
Ambos electrodos están separados por un electrolito de cerámica que conduce iones. Se está investigando en un parque eólico de Estados Unidos la aplicación de baterías de sodio azufre para la acumulación de energía eólica.
Baterías Metal Aire
Tienen un metal en el ánodo y un electrolito (disolución de potasa); el cátodo tiene una membrana de contacto con el aire que le permite reaccionar con el oxígeno, en lugar de tener un elemento químico oxidante. De esta forma, se crea un hidróxido en el metal, y se produce electricidad mientras aún exista metal. La ventaja es el ahorro de espacio al utilizar el aire como oxidante
Zinc - aire
Tienen tres veces más capacidad que las mejores de ión litio, pero todavía se encuentran en fase de investigación. Tienen una densidad energética de 370 Wh/kg. Han reemplazado a las de mercurio en las prótesis de oído. El principal inconveniente de los sistemas metal aire es que no son recargables, por lo que la investigación de este tipo de pilas se centra en la búsqueda de hacerlas recargables. La empresa ReVolt ya ha desarrollado un prototipo.
Aluminio aire
Almacenan 21 veces más que las de ión litio. En este caso, no existen modelos recargables, y no han tenido introducción en el mercado comercial. Es el tipo de batería que puede tener más potencialidad si se consiguen resolver sus problemas de corrosión y estabilidad. Actualmente sólo se utilizan en el ámbito militar.