Diversos países y regiones del mundo están comenzando a fomentar esta forma de transporte. En España, el Plan de Fomento de los coches eléctricos comienza hoy. Según sus objetivos, en unos pocos años habrá un millón de coches de este tipo circulando por nuestras carreteras.
La primera fase del Plan de Fomento de los eléctricos se pondrá en marcha hoy. Según este proyecto, en dos años habrá 2.000 vehículos eléctricos circulando por nuestras carreteras. Se destinarán cho millones de euros en subvenciones a la compra de este tipo de vehículos, que podrán ser también motocicletas o autobuses. Madrid, Barcelona y Sevilla contarán en este plazo con 500 puntos de recarga, que estarán subvencionados con otros dos millones.
Los coches eléctricos son una alternativa a los combustibles fósiles, sucios y caros. Pero también presentan inconvenientes. El principal es la escasa autonomía de estos vehículos, menos de 100 km., lo que les relega a funcionar únicamente en el ámbito urbano. El segundo es el tiempo de recarga de la batería, que requiere de varias horas. Y el tercero es el tiempo de vida de las baterías, que es de ocho años, y su elevado coste, 12.000 euros para un turismo normal. También es cierto que hay miles de ingenieros investigando sobre este tipo de transporte en todo el mundo y que es de suponer que, al igual que ha ocurrido con otras tecnologías, como el vídeo o el sonido, en unos pocos años la tecnología haya avanzado tanto que estos inconvenientes no supogan una limitación a la expansión de este transporte más limpio.
Algunas otras ventajas de los coches eléctricos es que, además de no emitir gases, tampoco producen ruido. De hecho llegan a ser peligrosos si circulan por una calle peatonal al salir de un parking, porque la gente no los oye. De generalizarse su uso, el centro de nuestras ciudades vivirán un cambio espectacular, al eliminarse el ruido y la contaminación causada por el transporte rodado.
Hay quien argumenta que en el fondo los eléctricos no suponen ningún avance si seguimos produciendo la electricidad mediante centrales térmicas o nucleares, pero parece ser que una de las alternativas viables es aprovechar los picos de producción de la energía eólica o solar para alimentar las bateráis de estos coches.
Fuente: Soliclima