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Según este acuerdo firmado por el dueño de Renault Carlos Ghosn, en presencia del presidente israelí, Shimon Pérès, Renault proporcionará los vehículos y Nissan las baterías de litio. Por su parte, la empresa Projet Better Place, de Shai Agassi, establecerá una red eléctrica de 500.000 terminales de recambio y un servicio de intercambio de baterías sobre el conjunto del territorio nacional.
 

 

 

La solución propuesta es la respuesta al reto que el Gobierno israelí lanzó a la industria automovilística y a sus proveedores, para hacer evolucionar las infraestructuras de transporte del país hacia la utilización de las energías renovables. El Gobierno israelí ayudará a los clientes por medio de incentivos fiscales.

Vehículos 100% eléctricos

Todas las funciones de los vehículos de Renault utilizarán solamente la electricidad. El objetivo «cero emisiones» se logrará ofreciendo al mismo tiempo resultados idénticos a los de un vehículo equipado de un motor de gasolina de 1,6 litros. Los vehículos eléctricos de Renault se equiparán de baterías ion-litio, garantizando una mayor autonomía y más longevidad.

 

Un modelo económico innovador

Es la primera vez que se disocia la propiedad del vehículo y las baterías. Los consumidores comprarán su vehículo y suscribirán una suscripción para su alimentación de energía que incluirá la utilización de la batería, facturada al kilómetro recorrido. Este esquema es similar al existente en el ámbito de los teléfonos portátiles, en que la suscripción mensual para el servicio se añade al precio de compra inicial.

El Gobierno israelí recientemente prolongó hasta 2019 una ventaja fiscal para la compra de todo vehículo «cero emisiones», lo que lo hace más accesible. Sabiendo que el coste de la electricidad es más escaso que el de las energías fósiles y que el vehículo se garantiza sobre su ciclo de vida, el coste de utilización total para el cliente será sensiblemente inferior al de un vehículo de motor térmico sobre el ciclo de vida completo del vehículo.

La infraestructura de la red de recambio

Project Better Place, cuya sede está en California, tiene la intención de construir una extensa red de terminales de recambio de las baterías. La autonomía ya no será un obstáculo para que sea posible recargar su coche en una de las aproximadamente 500.000 terminales que se establecerán en Israel.

Un sistema informático de serie indicará al conductor la cantidad de electricidad disponible y el terminal más cercano posible. Nissan, por medio de una filial común con NEC, concibió una batería respondiendo a las necesidades del vehículo eléctrico y garantizará su fabricación a gran escala. Renault está desarrollando «baterías cambiables» para garantizar una movilidad permanente. El conjunto del dispositivo se someterá a una serie de pruebas a partir de este año.

En Israel, donde un 90% de los automovilistas recorren menos de 70 kilómetros al día y donde la distancia entre los principales centros urbanos no supera nunca 150 kilómetros, el coche eléctrico podría ser el medio de transporte ideal, y podría responder a la mayoría de las necesidades de la población en cuanto a transportes.

Con su socio, Project Better Place, esta iniciativa representa la primera ilustración concreta del compromiso de la alianza que debe comercializar vehículos «cero emision» a gran escala en el mundo.

El Project Better Place

Project Better Place es una sociedad de capital de riesgo que tiene por objeto reducir la dependencia mundial al petróleo creando infraestructuras de transporte para los vehículos eléctricos, concebidas en función de las necesidades del mercado, y para ofrecer a los consumidores un medio de transporte alternativo que sea a la vez más limpio y más compatible con los imperativos del desarrollo sostenible.

Lanzada en octubre de 2007, Project Better Place construirá su primer red de recambio eléctrico en Israel y prevé desplegar la infraestructura país por país con el comienzo de los primeros despliegues en 2010.