«Hizo mucho daño en los campos de cultivo y en los caminos, pero las tierras se han recuperado. Quizá se note algo en que las cosechas se estén recogiendo con algunas semanas de retraso respecto a años anteriores», comentó Fernández, quien, no obstante, apuntó que la cosecha de aguacates sí se ha visto «seriamente dañada» por las lluvias torrenciales.
A esta circunstancia climatológica hay que sumar otra, la plaga de la araña de cristal, que viene afectando a estos árboles subtropicales desde hace varios años y contra la que aún no se ha encontrado un remedio eficaz. «A los agricultores ecológicos nos perjudican los tratamientos fitosanitarios que se aplican para tratar de combatirla», advirtió Fernández.
La cooperativa Balcón de Europa es una de las dos únicas que funciona actualmente en Nerja, junto a la cooperativa agrícola de Maro Coamar, que no comercializa productos ecológicos. Así, los 30 cooperativistas que integran la del Balcón de Europa son los únicos agricultores de Nerja que cultivan sus tierras conforme a los criterios que fijan las distintas certificaciones de agricultura ecológica. Entre estas distinciones destaca la del Comité Andaluz de Agricultura Ecológica (CADE).
Desde 1995, esta cooperativa distribuye los productos ecológicos de la vega de Nerja por toda Europa. «En España todavía existe muy poca concienciación hacia lo ecológico. El 95% de nuestra producción se exporta a países como Alemanía, Holanda, Francia, Dinamarca e Inglaterra», manifestó el secretario de la cooperativa Balcón de Europa.
Las diferencias de precios entre un producto ecológico y uno convencional pueden ser de hasta un 40%, explica Fernández. Así, el aguacate convencional se está pagando ahora a 1,5 euros el kilo, mientras que el ecológico se comercializa a 1,9 euros el kilo.