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La Comisión Europea no teme que haya graves trastornos en el suministro eléctrico en España ni en el resto de la Unión Europea a lo largo de este verano, siempre que no se registren condiciones meteorológicas inusuales, según explicó hoy el portavoz comunitario de Energía, Ferrán Tarradellas. En el caso de España, tampoco existiría riesgo de apagones graves aún cuanto las temperaturas fueran "severas", como sí puede ocurrir en países como Francia, Polonia o República Checa.
 

Los sistemas nacionales de suministro eléctrico son en la mayoría de los Estados miembros "adecuados" y por tanto "no hay riesgo de apagones" si se registra un verano "normal" en la UE, precisó Tarradellas, en base a los datos de un informe elaborado por la Asociación de Operadores Europeos de Sistemas de Transmisión (ETSO).

Los expertos consideran que a pesar de que existen países que ya dependen en cierta medida de la importación de electricidad en épocas estivales, éstos "son conscientes" de dichas dificultades y "ya han tomado medidas para hacer frente a la situación" en caso de una ola de calor u otras circunstancias extremas.

Las conclusiones de este informe tienen como referencia los datos que han sido facilitados por los propios Estados miembros y que, una vez recopilados, han sido comprobados y validados por Bruselas.

Los expertos han tenido en cuenta los efectos de las condiciones meteorológicas y por tanto no excluyen la posibilidad de "pequeños cortes" relacionados con otras cuestiones como, por ejemplo, eventuales averías. Como ejemplo, recordaron el apagón sufrido el pasado año en Barcelona a causa de una avería en las instalaciones y que afectó a más de 300.000 personas.